La ONU denuncia que la “impunidad es la norma” en Nicaragua
Agencias
La Alta Comisionada adjunta para Derechos Humanos de la ONU, Nada Al-Nashif, denunció este lunes que siguen con preocupación que el régimen de Daniel Ortega en Nicaragua se “desvía” cada vez más del estado de derecho y que la “impunidad es la norma” que rige sus acciones.
“Nuestra oficina continúa documentando graves violaciones de derechos humanos que han tenido lugar en Nicaragua desde 2018. Dirigentes políticos y líderes indígenas, miembros de la iglesia católica, defensores de los derechos humanos, periodistas y otras personas han sido sistemáticamente atacados por el Gobierno por expresar opiniones diferentes”, denunció Al-Nashif.
“Muchos están en el exilio, sin posibilidad de regresar… Quienes permanecen en Nicaragua están en constante amenaza o enfrentan una serie de graves violaciones de derechos humanos, y la impunidad es la norma”, señala.
Al-Nashif se dijo “descorazonada” por la falta de medidas para impedir que se produzcan violaciones de las libertades fundamentales y por el “continuo distanciamiento del gobierno de los derechos humanos, el estado de derecho y otros principios democráticos”.
Según la oficina de la ONU, el gobierno sandinista sigue persiguiendo a quienes pueden aportar una visión alternativa a la esfera pública e incluso inhabilitan el derecho democrático de los indígenas del Caribe.
La ONU señala lo ocurrido el 3 de octubre pasado cuando el régimen de Ortega “cancelaron arbitrariamente” la personalidad jurídica de YATAMA, el principal partido político indígena y afrodescendiente de Nicaragua.
“Cada día, el país se desvía aún más de los derechos humanos, profundizando el sufrimiento de la gente, provocando el éxodo de los jóvenes y socavando el futuro de las instituciones públicas democráticas”, señaló Al-Nashif.