El MARN en busca de salvar el Coatepeque
La reciente declaratoria de estado de emergencia ambiental en el espejo de agua del lago de Coatepeque, emitida por el Gobierno de El Salvador debido a la proliferación de cianobacterias, ha generado una respuesta coordinada por parte de un equipo multidisciplinario que aborda la problemática desde diferentes ángulos.
«La declaratoria de emergencia ambiental es esencialmente un mecanismo para coordinar las acciones de las instituciones gubernamentales de El Salvador. Se han asignado responsabilidades específicas, cada una destinada a abordar distintas facetas de la situación», explicó el ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Fernando López, durante una conferencia de prensa el miércoles.
El ministro enfatizó la colaboración entre diversas entidades gubernamentales, incluyendo la Autoridad Salvadoreña del Agua, el Ministerio de Obras Públicas, el Ministerio de Agricultura, así como la Policía Nacional Civil y sus divisiones especializadas en Medio Ambiente y Turismo, para ejecutar las acciones necesarias.
Se ha identificado que la proliferación de algas en el lago de Coatepeque, causada por las cianobacterias, se debe a múltiples factores, entre ellos la temperatura y su interacción con diversos químicos en el agua, provenientes principalmente de fuentes de contaminación como aguas residuales, escorrentías de lixiviados y agroquímicos utilizados en actividades agrícolas locales.
Ante esta problemática, se han planificado diversas medidas, incluyendo la limpieza inmediata de las cianobacterias, la instalación de boyas ultrasónicas y sistemas de oxigenación en el lago para prevenir futuras proliferaciones de algas.
El plan de acción también contempla la construcción de sistemas de drenaje y plantas de tratamiento de aguas residuales, así como la promoción de la responsabilidad individual en la prevención de la contaminación, como destacó el ministro López durante la conferencia.
