Israel lanza nuevos bombardeos en el Líbano
AFP
La situación en Medio Oriente se agitó aún más el domingo y continuó este lunes luego que el ejército israelí lanzara una andanada de bombardeos contra Hezbolá en el Líbano que dejaron más de 100 muertos y además, golpeó objetivos de los rebeldes hutíes en el oeste de Yemen, después de que estos insurgentes proiraníes reivindicaran el lanzamiento de un misil contra el aeropuerto de Tel Aviv. Estos bombardeos provocaron cuatro muertos, según medios de los rebeldes yemenitas.
Manteniendo la presión militar contra Hezbolá, una formación chiita proiraní, el ejército israelí indicó que golpeó 120 objetivos en el Líbano el domingo.
Y este lunes, un bombardeo israelí contra un edificio de apartamentos en Beirut dejó cuatro muertos, en el primer ataque en el corazón de la ciudad desde el estallido de la guerra en la Franja de Gaza el año pasado, informó una fuente libanesa de seguridad.
El ataque con drones tuvo como objetivo el apartamento de dos integrantes del grupo islamista libanés Jamaa Islamiya en el distrito de Kola, según la fuente. La acción del lunes es la primera dentro de los muros de la capital libanesa en el último año.
El Frente Popular para la Liberación de Palestina, un grupo secular de izquierda dijo que tres de sus integrantes murieron en el ataque. Imágenes de televisión mostraron el apartamento parcialmente destruido en el edificio atacado, el en distrito de mayoría sunita de Kola.
Los ataques se produjeron después de haber asesinado el sábado al líder del movimiento islamista libanés, Hasán Nasralá, junto con decenas de otros miembros del grupo en otro ataque. Corresponsales de la AFP escucharon una fuerte explosión y vieron columnas de humo brotando de los suburbios del sur de Beirut, bastión de Hezbolá.
La muerte de Nasralá, que era considerado el hombre más poderoso del Líbano, constituye una gran victoria de Israel frente a su archienemigo Irán y sus aliados, pero empuja a la región a un terreno desconocido.
Hezbolá, financiado y armado por Irán, fue creado en 1982 durante la guerra civil en el Líbano, a iniciativa de los Guardianes de la Revolución de Irán.
