Precio de la energía ha subido 57 % en el último año
El encarecimiento del crudo ha empujado a que el precio de la energía eléctrica en El Salvador haya subido un 57 % en el último año y se encuentre en su valor más alto desde 2014, según datos de la Unidad de Transacciones.
El fin de semana pasado, la Superintendencia General de Electricidad y Telecomunicaciones (Siget) anunció que para el próximo trimestre no variará el precio de la energía como parte de una medida de estabilización para amortiguar la crisis inflacionaria.
Esto significa que los hogares salvadoreños continuarán pagando el mismo valor por cada kilovatio que consuma como en los últimos tres meses, aunque los costos de generación se hayan mantenido al alza.
Desde inicio del 2021, el precio de la energía en El Salvador acumula cuatro incrementos consecutivos debido principalmente al encarecimiento del petróleo que se utiliza para las centrales térmicas que suministran electricidad en la temporada de verano.
El precio del megavatio hora (MWh) se cotizaba por debajo de los $100 desde el último trimestre del 2019, un comportamiento que cambió a inicios del 2021 cuando superó esa banda. Sin embargo, los incrementos se agudizaron en los últimos tres meses del año pasado hasta llegar a colocarse en $159.56 el MWh en marzo pasado.
Al comparar con el mismo mes de 2021, cuando valía $101.16, significa que el costo de generar un MWh subió $58.4 y equivale a un incremento interanual del 57.7 %, según los datos de la UT, administrador del mercado mayoristas energético.
El precio del MWh de marzo pasado es el más alto desde 2014, año en el cual el megavatio hora llegó incluso a costar $181 debido al incremento del petróleo a nivel mundial.
En marzo pasado, la Comisión Ejecutiva Hidroeléctrica del Río Lempa (CEL) confirmó que para el trimestre de abril a julio la energía tendría un nuevo incremento entre 4 % y 6 %, pero por la estabilización de precio este no se trasladaría al consumo final.
El Consejo Nacional de Energía (CNE) reporta que la matriz de generación acumulada al 31 de marzo pasado era respaldada principalmente por las inyecciones de la tecnología geotérmica, biomasa (ingenios) y búnker (petróleo).
La generación de geotermia es exclusiva de LaGeo, una subsidiaria de CEL, que suele tener mayor participación en el mercado porque su energía es más barata que el resto de tecnologías. Según el CNE, tuvo un aporte del 25.31 % de la matriz acumulada a marzo pasado.
El aporte de la biomasa, por su lado, aumenta en esta temporada porque los ingenios están en plena zafra y tuvo una participación del 21.7 %. Luego, está la generación de electricidad con búnker que representó el 19.9 %.
La tecnología hidroeléctrica aportó el 16.81 %, esto es menor al resto porque en esta época los embalses suelen tener menos cantidad de agua por el verano, mientras que la generación fotovoltaica ocupó 9.81 %.
A marzo, hubo aportes de la generación eólica de un 3.6 % del primer parque con esta tecnología ubicado en Metapán, Santa Ana, aún no inaugurado, así como de la planta de gas natural licuado (GNL) en Sonsonate que se entregará en mayo próximo con un aporte del 2.78 %.
