“Hasta el tope” 16 de noviembre 1989
Después del acuerdo alcanzado en México, el 11 de noviembre de 1989 el FMLN
lanzó una ofensiva general sobre San Salvador. Fue la operación militar más
importante de toda la guerra y marcó el camino hacia un final negociado.
Por primera vez en todo el conflicto, las hostilidades se presentaron en
las colonias de la capital en las que vivían los oligarcas salvadoreños. Éstos,
junto al Gobierno y los militares, vieron cómo la guerrilla sentaba posiciones
a pocas cuadras de sus residencias y cuarteles generales.
La madrugada del 16 de noviembre de ese año, en plena ofensiva, seis jesuitas de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA), una de sus empleadas y la hija de ésta, aparecieron asesinados. Fue un hecho que restó mucho capital político a las fuerzas armadas y mucho apoyo desde Estados Unidos.

En diciembre de 1989, tras la ofensiva, se retomó la negociación en México y se avanzó hacia un nuevo acuerdo formal, firmado en Ginebra el 4 de abril de 1990. Allí se establecieron objetivos básicos de la negociación, que una vez logrados deberían establecer las condiciones y garantías para la incorporación de los integrantes del FMLN a la sociedad.